15 de noviembre de 2023.
Una interesante charla que abordó los desafíos a los que se enfrentan las editoriales independientes en México se llevó a cabo durante la mesa Resistencia y edición: experiencias, del II Encuentro de Editores Independientes, celebrado el martes 14 de noviembre del presente año; en El Colegio de Sinaloa. La actividad contó con las participaciones de: Javier López, de Bonobos; Antonio Marts, de Paraíso Perdido; Juan José Macías, Taberna Libraria; Quitzé Fernández, de Amonite; y Francisco Meza, de Editorial Revista UAS. Como moderador estuvo Luis Armenta Malpica, poeta mexicano y director de Mantis Editores.
En la bienvenida, Luis Armenta señaló la importancia de estos eventos que reúnen a editores de diferentes estados de la República mexicana y permiten establecer vínculos y exponer propuestas que fomenten el crecimiento de las editoriales independientes. “Hablar del libro desde la particularidad de cada sello editorial, así como de las novedades, claro que es importante, sin embargo, no siempre se tiene la oportunidad de dialogar entre editores para establecer lazos y apoyos, por lo que hay que aprovecharlo”, externó.
En cuanto a las dificultades que enfrenta la industria editorial, Javier López, de Bonobos, destacó a los dispositivos electrónicos y las aplicaciones de lectura digital como una posible competencia: “podemos pensar que nos roban lectores o, por lo menos, disminuyen la venta del libro físico”. No obstante, aclaró que este nuevo formato de lectura no tiene por qué estar peleado con la producción editorial: “lo más adecuado sería adaptarnos a la nueva ola digital, unirse al enemigo, buscar sinergias y hacer crecer al público lector”, apelando a quienes prefieren la experiencia del libro físico, así como a quienes optan por leer en su celular.
Retomando el tema del establecimiento de vínculos entre editores, Antonio Marts, de Paraíso Perdido, comentó que las casas editoriales deben asumirse como empresas culturales y creativas que —como cualquier otra empresa— suelen enfrentarse a diversas situaciones económicas, de producción, difusión y distribución de sus obras, por lo que celebró la propuesta de crear un directorio de editoriales. “Es necesario tener este tipo de herramientas que nos permitan dirigirnos a otros colegas para apoyarnos, resolver dudas, unir fuerzas y trabajar en equipo”.
Otra de las dificultades a las que suelen enfrentarse es la distribución de sus obras en librerías de cadena, debido a que no cumplen con los requisitos para formar parte de su catálogo. “Las más conocidas exigen que se tenga una sede en la Ciudad de México, por ejemplo. Me parece muy injusto que se pongan estas trabas, ya que las librerías son un eslabón importantísimo en la cadena de la distribución y aunque no descuidamos nuestra relación con las librerías independientes, lo cierto es que las librerías de cadena se encuentran bien posicionadas en el mercado y tienen mucho mayor alcance”, enfatizó.
Ante estas dificultades, Antonio Marts compartió la creación de Literal, una librería virtual que tiene como propósito apoyar la difusión y distribución de los materiales independientes. Señaló que actualmente es un proyecto que trabaja solo, por lo que invitó al público en general a colaborar con él.
Sumándose a la conversación respecto a la problemática de distribución con las librerías de cadena, Juan José Macías mencionó que Taberna Libraria era una casa editorial que, a su vez, tenía una librería en la que distribuían su producto. “No sé si mis colegas editores cuenten con estos puntos de venta propios, pero podría ser una solución momentánea a la cuestión de la distribución”. También, resaltó la importancia del trabajo de las editoriales independientes para los escritores emergentes, ya que —contrario a las grandes empresas editoriales— apuestan por la calidad literaria y académica de los textos, más que por el prestigio de un nombre.
Quitzé Fernández compartió que su labor editorial comenzó a través de una página web de comunicación en la que se publicaban revistas y periódicos científicos para niños, niñas y adolescentes. Posteriormente, junto al Consejo de Ciencia de Coahuila, publicaron su primer libro físico, siendo esta experiencia la que daría pie a la colaboración con diversas instituciones, así como a la posterior creación de Amonite. Describió su experiencia de crecimiento como atípica, puesto que desde sus inicios han editado y publicado textos científicos, mientras que hoy se involucran con la distribución de material literario, como Un librito de bichos, de Viridiana y Paloma Lizardo; y Huesos lamidos por el sol, de Alfonso Orejel y Ricardo Bobadilla.
“Cuando llegó Un librito de bichos a la editorial tuve mucha precaución porque no sabía cómo distribuirla. Normalmente producimos tirajes de mil ejemplares, pero en esta ocasión sólo imprimimos quinientos. Fue una sorpresa para nosotros lograr vender cien ejemplares el primer día en una feria, ya que solemos vender doscientas piezas al año. Por lo que creo que, como editorial, vamos por buen camino”, afirmó.
Hacia el final de la mesa, Francisco Meza externó su agradecimiento a editoriales independientes, entre las que destacó a Praxis Grupo Editor, La Otra H y Andraval Editores, puesto que han confiado en su trabajo y publicado diversos textos de su autoría. Además, comentó que la Revista de la Universidad Autónoma de Sinaloa tiene como objetivo apoyar la publicación y difusión de escritores y académicos de diversas áreas del conocimiento —emergentes o ya posicionados en su materia—, por lo que exhortó al público en general a estar atentos a la convocatoria semanal publicada a través de las redes sociales y el portal oficial de la universidad.