19 de febrero de 2024.
El tema de los microplásticos es considerado urgente a nivel mundial, una problemática ambiental, toxicológica y médica, dijo en su conferencia el doctor Federico Páez Osuna —miembro de El Colegio de Sinaloa— sobre Microplásticos omnipresentes, una amenaza para el ambiente y la salud, impartida el viernes 16 de febrero, en la Facultad de Ciencias Químico-Biológicas de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y contó con la presencia del director de la facultad, Dr. Eusiel Rubio Castro.
El doctor Federico Páez Osuna señaló que el tema es muy reciente —data alrededor de tres a cinco años—, ya que tuvo un aceleramiento en su investigación a partir de la pandemia y que más allá de ser una amenaza ambiental, ya es una realidad, al encontrarse microplásticos (MPs) en casi todos lados.
“Algunos expertos han considerado que vivimos en realidad la era del plástico”, comentó al presentar encabezados de noticias que indicaban el hallazgo de microplásticos en la leche materna, en pulmones de humanos vivos y en heces humanas, lo que orilló a los científicos a preguntarse si hay plásticos en el cuerpo humano.
Enfatizó que en los últimos 30-50 años, el plástico ha reemplazado a otros materiales. “Estamos viviendo una paradoja con los plásticos y microplásticos; los plásticos hacen nuestra vida más fácil, más higiénica, barata, son livianos, duraderos… tienen muchas características y tienen un uso casi infinito. Pero por otro lado tenemos que hay una producción y un consumo que se ha incrementado exponencialmente”, afirmó Páez Osuna.
Asimismo, añadió que los plásticos han emergido como una de las grandes preocupaciones. Para tener una idea de esta afirmación, analizó la producción de los materiales que se producen más a nivel mundial, siendo la producción de plástico la tercera posición con 400 millones de toneladas. Mencionó cuáles son los principales plásticos de nuestra vida diaria, entre los que destacan: polietilenos de baja densidad, polipropileno, policloruro de vinilo, poliestireno, entre otros.
En un inventario realizado en 2017 a nivel mundial para saber cuánto plástico había según el uso, Páez Osuna explicó que los plásticos para envases y embalajes concentra la mayor cantidad —aproximadamente el 44.3%— además, tienen un tiempo de vida útil menor al resto de los usos, a estos los refirió como PUSU, es decir, plásticos de un solo uso.
De manera relevante, el doctor Páez Osuna abordó las islas de plástico, cúmulos de plástico que se forman a partir de remolinos creados por las corrientes del mar concentrando la basura en la superficie de los océanos, principalmente plástico. Agregó que actualmente hay alrededor de seis a siete islas de plástico.
El enfoque en que se estudiaban los plásticos cambió hace unos ocho años, “se descubrió que los plásticos no desaparecen, sino que comienzan a fragmentarse y se convierten en microplásticos secundarios”, comentó el académico. Llamó (según GESAMP, 2015) microplásticos a los que miden entre 1-1000 µm y nanoplásticos a los menores a 1 µm.
También analizó a los microplásticos primarios, es decir, que fueron producidos de ese tamaño. Dijo que los MPs primarios son microesferas fabricadas para el cuidado personal, tal es el caso de los productos de belleza, por eso, para el doctor Páez Osuna la belleza tiene un costo ambiental. Sin embargo, siguen siendo los MPs secundarios los más abundantes, sobre todo los que se derivan de las fibras textiles y del uso agrícola.
Entre otros aspectos, expresó que “hay contaminantes que se pueden asociar a los microplásticos y nanoplásticos que se encuentran en el ambiente, o sea los microplásticos pueden atrapar o liberar a estos contaminantes como los COPs (compuestos orgánicos persistentes) o los metales pesados”.
Hacia el final de su conferencia, detalló nuevamente el descubrimiento de microplásticos en el cuerpo humano y ejemplificó que la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD) tiene relación con la presencia de microplásticos en el tracto intestinal. Igualmente, abordó que hay estudios que demuestran esta presencia de MPs en camarón blanco (Litopenaeus vannamei).
Señaló que está trabajando en la técnica para aislar los MPs del camarón, siendo una de sus muestras la de una granja en Santa María La Reforma, en Sinaloa: “encontramos que por cada camarón había dieciocho y medio microplásticos por individuo, en promedio”, añadió que la buena noticia es que la mayoría de MPs se concentran en la tripita, por lo que recomienda retirarla antes de comerlos. Otra de sus muestras fue tomada de la laguna Huizache-Caimanero, donde encontraron en camaron silvestre 13.3 MPs por individuo.
Para concluir, Federico Páez Osuna subrayó que “si bien el plástico se ha vuelto indispensable para el modo de vivir, se reconoce como insostenible”, asimismo, remarcó que “los plásticos de un solo uso son el objetivo al representar como el 44% de la producción y son los más fáciles de eliminar y reemplazar”; lo anterior —aclaró— va de la mano con un cambio en la cadena de producción y la implementación de políticas de producción responsable y reúso de plásticos.