20 de agosto 2020
A manera de compilación y recorrido virtual, la reconocida historiadora emérita por el INAH, Dra. Consuelo Maquívar brindó la conferencia Luz y tinieblas en la iconografía, la tarde de este jueves 20 de agosto de 2020, bajo el ciclo de Diálogos en El Colegio de Sinaloa. La actividad se compartió a través de las redes sociales de El Colegio de Sinaloa, las cuales permanecerá abiertas para el acceso público.
En su introducción la Dra. Consuelo Maquívar explicó cómo se percibe la luz y la oscuridad en la biblia católica, en el génesis capituló primero (Gen.1,1-5), el cual detalla que cuando Dios hizo la creación de la tierra dividió la Luz para el día, representando la salvación y la vida, mientras que la oscuridad para la noche representando la maldad y las tinieblas. La experta comentó que una interpretación perfecta de este concepto, fue pintada por Miguel Ángel en la Capilla Sixtina entre el año 1508 y 1512.
“Quiero con esta presentación detallar al público, que la iglesia se ha valido de estas imágenes para explicarle a los fieles lo que con palabras se ha expresado a lo largo de los siglos, bien sea en base a las enseñanzas de Jesucristo recabadas en la Biblia, en la historia sagrada y en los sermones de los predicadores, así como en los textos sagrados”, recalcó la historiadora de arte sacro.
Consuelo Maquívar indicó que existe un grabado de Rembrandt creada entre los años 1606-1669, donde representa a Cristo en una de sus misiones en una técnica claro oscura, donde se puede apreciar que cristo está envuelto en un velo de luz, mismo que ilumina al resto del cuadro.
La doctora indicó que en donde también se puede apreciar la técnica del claro oscuro es en cuadro Entierro del conde de Orgaz (1587), del artista El Greco, el cual esta ubicado en la capital de Toledo. Se aprecia el plano terrenal pintado con colores más oscuros pero iluminando a ciertas figuras católicas importantes entre ellas San Francisco de Asís, en la parte superior de la pintura se observa mucho más luz para representar la gloria celestial.
Al remontarse en el arte sacro nacional, la historiadora mencionó la Cúpula de la Catedral de puebla pintada por Cristóbal de VillalPando en el siglo VXII, a principios del barroco, donde se observa que el artista aprovechó en su totalidad el espacio dispuesto, ya que en el centro de la cúpula existe un tragaluz el cual da pie para que en su alrededor ilumine a los celestiales que se pintaron.
Consuelo Maquívar Agregó que una de las representaciones más destacadas en las pinturas sagradas, es la Santa Trinidad, dijo que en México una de las más importantes es de VillalPando, puesto que el mismo acató las recomendaciones del tratadista de iconografía, Francisco Pacheco, suegro del pintor, Diego Velázquez.
Para finalizar con su dialogo, la historiadora detalló que la representación de la Asunción de María a los cielos, es también icónica: “En todas las pinturas se observa como María madre de Dios, no muere si no que asciende al cielo, a esto los franceses lo conocen como la dormición, pero aquí nosotros lo entendemos mejor como una especie de tránsito del plano terrestre hacia la gloria celestial”, subrayó.