10 de junio de 2024.
La escritora Mónica Castellanos sostuvo un conversatorio virtual con integrantes de clubes de lectura de Culiacán, en torno a su novela más reciente Carbón rojo; este lunes 10 de junio del presente año, en la sala de videoconferencias de El Colegio de Sinaloa. La actividad se enmarca dentro de la agenda del Club de Lectura Efecto Tequila coordinada por el Mtro. Élmer Mendoza, presidente de este organismo, quien estuvo presente en la reunión.
Mónica Castellanos (Monterrey, Nuevo León) ha publicado “Canasta de comadres”, “Aquellas horas que nos robaron, el desafío de Gilberto Bosques” —ganadora del premio Antonio García Cubas 2019, en la categoría de Novela Histórica—. En 2021 publicó “El aroma de los anhelos” y, en 2023, “Carbón Rojo”.
Como primer punto, Mónica Castellanos habló del proceso de creación de los personajes. Entre algunos comentarios, se destacó el aspecto de nombrar con colores a personajes femeninos: Carmina, Celeste, Blanca, Violeta, entre otros. La autora señaló que estas mujeres se reflejan a través de sus nombres. “Imaginaba a Carmina como una mujer con un interior muy intenso, apasionado, dominado por la culpa, por la situación que estaba viviendo en Rosita, Coahuila, por todas estas pasiones fuertes del ser humano y, al mismo tiempo, en un entorno muy oscuro; entonces dije, es una mujer roja: Carmina. Fue algo que se fue dando por sí mismo el que las mujeres estuvieran nombradas por colores”.
Los colores también se aprecian en las relaciones que plantea la autora como: bruma blanca, polvo negro, “y en su momento llega carbón rojo. No es el carbón encendido, el que está al fuego, es el carbón que le ha costado sangre a los mineros”, explicó que los mineros se refieren al carbón rojo como el que ha sido extraído de minas que han cobrado vidas humanas.
Entre las líneas temáticas del libro, se encuentra el caso de la mina Pasta de Conchos, ubicada en Coahuila. Sobre esto, Mónica Castellanos habló de cómo recurrió a diversas entrevistas, grabaciones de internet, imágenes, entre otros recursos de investigación para escribir sobre este desastre minero.
Para abordarlo utilizó recursos como el habla (léxico) de los mineros. “Te metes al habla, las palabras típicas, las expresiones concretas con las que se refieren unos a otros”. Mencionó su interés porque el lenguaje transparentara el día a día de un minero, de los elementos que están dentro de la mina y del proceso de la extracción del carbón.
Asimismo, planteó que la literatura minera —que es poca— ha excluido a las mujeres, es decir, la aproximación parte desde los hombres, en su mayoría. Enfatizó que quería no sólo abordar a los mineros, sino que tomaran parte las mujeres: ¿qué pasa con las esposas, las amantes, las hijas, hermanas, las madres?, que son las que se quedan afuera en la espera.
“Por eso gran parte de la novela, vemos esta actitud de lucha que sigue hasta hoy en día”, comentó la escritora.
Otro tema que se aborda en la novela es el entorno familiar, ya sea la relación de una de las hermanas, Ada, con un cura, o el que la otra hermana, Carmina, pudiera hablar con los muertos. En la plática se hicieron comentarios respecto a las tensiones que surgen en las relaciones familiares en la novela, y cómo estas atienden también al entorno social.