9 de noviembre de 2023.
Ante estudiantes de la carrera de Ciencias Biomédicas de la Universidad Autónoma de Occidente, la doctora Yareli Rojas Aguirre —investigadora del Instituto de Investigaciones en Materiales de la UNAM— impartió la conferencia: Los materiales en la nanomedicina: nanocontenedores hechos de azúcar, este jueves 9 de noviembre del año en curso, en el auditorio «Julio Ibarra Urrea» de la UAdeO Unidad Culiacán.
En primera instancia, Yareli Rojas explicó que la nanomedicina puede definirse como la combinación de la nanotecnología con la medicina; añadió que la nanomedicina involucra, además, la aplicación de las nanociencias al tratamiento, diagnóstico y prevención de enfermedades, pero también utilizar las herramientas de la nanotecnología para entender una enfermedad (por ejemplo, en microscopía).
Posteriormente definió tres áreas en que se puede dividir el campo de estudio de la nanomedicina: terapia —diseño de sistemas de liberación de fármacos—; diagnóstico, que tiene por objetivo generar sistemas que permitan identificar una enfermedad; y medicina regenerativa, es decir, el diseño de materiales enfocados en la ingeniería de tejidos para reemplazar tejidos dañados o regenerar tejidos de manera natural.
“Dentro de la nanomedicina el sueño es controlar, especialmente las propiedades de la materia”, con base en esto, señaló que la nanotecnología es el campo que precisamente se encarga de controlar y manipular estructuras y materiales para resolver, diagnosticar e identificar una enfermedad. “Lo que queremos en el área biomédica es controlar respuestas, señales o inducir algo de manera controlada”, por lo que, comentó, se sirven de la nanotecnología para crear los sistemas que desean. Ejemplificó que en la farmacéutica buscan controlar la liberación del fármaco en el espacio, es decir, reconocer únicamente a la célula deseada y liberar la carga terapéutica solamente en el tiempo que se quiere.
El tema principal de su conferencia fue el diseño de nanocontenedores hechos de azúcar. Yareli Rojas explicó que a partir de la bacteria Bacillus macerans, cuando está en presencia del almidón (por ejemplo, almidón de papa), puede cortar el almidón a través de una enzima que se llama Ciclodextrina glucanotransferasa, en sitios específicos de 6, 7 u 8 unidades de azúcar, mismas que las cierra en forma de círculo. Estos macrociclos compuestos de unidades de glucosa son los nanocontenedores de azúcar.
“En el plano tridimensional tienen la forma de un cono; el cono tiene una cavidad y ésta la puedes utilizar para guardar moléculas, entonces se convierten en un contenedor hecho de azúcar”. Comentó que el tamaño de las cavidades es del orden de nanómetros, por eso agregó que “es un contenedor de todo uso en el área de la química”.
Entre otros aspectos, la investigadora detalló que en dichas cavidades se pueden guardar compuestos y, a su vez, modificar sus propiedades como la solubilidad y la estabilidad.
Cabe mencionar que en la actividad estuvieron presentes el Dr. Juventino III Colado Velázquez, coordinador de Ciencias Biomédicas y jefe del Departamento de Salud de la Universidad en comento; así como el Mtro. José Carlos Barajas Villalbazo, director de Vinculación Académica de El Colegio de Sinaloa.
Coordinado con la UNAM, la conferencia se enmarca en el programa académico Ciencia en Directo, en su modalidad presencial, por lo que el viernes 10 de noviembre también estará en la Universidad Politécnica de Sinaloa de Mazatlán.